Niñez

Niñez es creer en Dios.
Niñez es ignorar que el mundo
es un montón de escombros antes de uno nacer.
Niñez es no ser padre de otros seres humanos.
Niñez es un montón de tebeos
que se pueden cambiar por una moneda en la papelería.
Niñez es no necesitar a otro ser humano
para sentirse entero.
Niñez es el perfume de la tierra mojada,
y la lluvia y la nieve
sin más connotaciones literarias.
 
Es leer Moby Dick
masticando un bocadillo de ganas.
Es un trozo de cielo
que se ve por la ventana de la cocina
mientras madre bate claras de huevo con azúcar,
cuando aún los edificios no son rascacielos.
Es tener un amigo que no espera de ti
nada más que encontrarte al día siguiente.
Es no saber aún que por todo se paga
(el amor, el respeto).
Es pensar que llegamos a este mundo
bienvenidos.
Es creer en las personas mayores
y pensar que el profesor es justo y sabio.
Niñez es una peonza girando como un pequeño planeta.
Niñez es suponer que nadie te hará daño
si tú a nadie lo haces.
Y niñez es saber, de algún modo secreto,
que todo éso es mentira,
y que el Hombre del Saco al final llega
y te lleva a su mundo, el de verdad.